En primer lugar, sacude o mueve todo tu cuerpo y gruñe como un cerdo.
(De verdad, ¡pruébalo!)
A continuación, salta sobre un pie (o haz rebotar tu cuerpo) mientras nombras 3 de tus cosas favoritas.
A continuación, ponte dentro de una burbuja invisible de seguridad y extiende los brazos hacia los bordes.
A continuación, date un GRAN ABRAZO.
Y para terminar, respira profundamente 5 veces para reducir tu ansiedad al tamaño de una gominola.
(Activa el sonido y pulsa el play.)
Ahora pregúntate: "¿Qué me preocupa? ¿Tengo miedo de fracasar o de cometer un error? ¿Tengo miedo de pedir ayuda?"
Hace falta valor para probar cosas nuevas. Y los errores forman parte del aprendizaje.
Utiliza el poder del "Todavía" para transformar la preocupación de fracasar en el valor de intentarlo: Di: "Todavía no puedo hacer esto... Todavía no soy bueno en esto... Todavía no entiendo esto".
Puedes convertir tu ansiedad en valor simplemente intentándolo.
Lo único que tienes que hacer es EMPEZAR.
Ya lo tienes.
